Jammie Thomas-Rasset fue multada con $222,000 dólares y acusada de descargar y distribuir más de 1,700 canciones de manera ilegal. Sin embargo, para el veredicto el jurado únicamente tomó en cuenta la descarga de 24 melodías.
De acuerdo con la Recording Industry Association of America (RIAA), el motivo para buscar la sentencia por 24 canciones fue que tratar de procesar una multa para las 1,700 sería extremedamente complicada.
Por su parte Thomas-Rasset argumentó que nunca había escuchado del programa KaZaA —software con el descargo las canciones—, que de hecho ni lo tenía en su computadora y mucho menos había descargado archivo alguno, según dice la sentencia.
Sin embargo, el investigador forense del caso alegó que la ciudadana de Minnesota removió y reemplazó el disco duro de su computadora después de que había sido notificada de su infracción, el nuevo disco no contenía los archivos en cuestión.
Desde el 2006, tras pasar por diferentes instancias y multas desde los $54,000 dólares hasta casi dos millones de dólares, la corte decidió dejarlo en $222,000.
El abogado de Thomas-Rasset, Kiwi Camara, aseguró que agotarán todas las instancias y llevarán el caso ante la Suprema Corte.
La RIAA demandó a más de 18,000 personas por compartir de ilegalmente música a mediados de la década pasada. Sin embargo, la mayoría de estos casos se resolvieron en la corte o fueron desechados. El de Thomas-Rasset fue una de las excepciones.
A partir del 2008, el grupo ajusto su estrategia antipiratería y dejó de demandar individuos solos.
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